Cuando estaba embarazada de mi primer hijo, tenía esta idea de cómo sería mi nacimiento. Rompería fuente, iría al hospital y en poco tiempo, sin medicamentos, daría a luz a mi bebé. Alrededor de las 12:35 am me desperté con la sensación de que necesitaba orinar, ¡era mi fuente rompiendo! Me sentí muy bien y no tuve contracciones, así que me tomé mi tiempo para prepararme e ir al hospital. Nos quedamos esperando un rato en triaje antes de preguntarle a una enfermera si podía ir al baño. Ella dijo que necesitaban revisarme primero. ¡El médico vino y me revisó y dijo que no necesitaba ir al baño y que era hora de tener un bebé! ¡Me dijo que "esperara" porque no puedes dar a luz en el triaje! No hubo tiempo para medicación ni epidural ya las 5:19 am nació mi hija. Tuve mucha suerte por una entrega tan rápida y fácil para un primer parto (¡y segundo!). Muchos primeros trabajos pueden durar mucho, mucho más. ¡No podía creer que sucediera exactamente como esperaba que sucediera!